El acceso del Hotel Cimbel surge de la necesidad de potenciar la fachada principal del Hotel, junto con su acceso, haciendo uso de elementos compositivos como la celosía para tamizar la luz y aportar una estética liviana y ligera que sirva como cartel de bienvenida a este emblemático hotel de Benidorm. La estructura se inclina diez grados para mostrar el dibujo de la celosía desde cualquier perspectiva, el cual además se redibuja en el pavimento cuando la incidencia de los rayos del sol es más vertical creando un efecto de duplicidad. Para enfatizar esta sensación de ligereza y pureza, a los tonos grises claros y blancos, se le añade los tonos verdes propios de la vegetación que se localiza en dos jardineras integradas de las cuales no solo brota la vegetación, sino los pilares donde apoya la estructura como si de un árbol más se tratase.